15/4/12

Una vecina de Dorneda denuncia continuos ataques de jabalíes en su finca

Desde que comenzaron las obras del primer tramo de la vía ártabra la vecina de Dorneda Angélica Díaz dice no vivir tranquila. La razón de su desasosiego no son los ruidos de las máquinas, los movimientos de tierras o el paso de camiones pesados, son los jabalíes.

Y es que la mujer asegura que desde mediados del año 2010 sufre "continuos ataques de jabalíes", tal y como reza la denuncia que presentó ante la Xunta el pasado 7 de febrero. Explica Angélica Díaz que los animales han ocasionado diversos desperfectos en su propiedad. "Han roto el cierre de la finca, me han destrozado la huerta, no puedo tener animales e incluso he llegado a temer por mi seguridad física", sostiene la afectada, que recuerda que en una ocasión una hembra, acompañada por sus jabatos, le "hizo frente" y tuvo que resguardarse tras la puerta de la huerta que, apostilla, hizo las veces de "burladero".

Previamente a la denuncia que presentó en la Xunta, esta vecina de Oleiros trasladó su problema al Ayuntamiento así como a la Policía Local y a la Guardia Civil. También lo puso en conocimiento de Conservación da Natureza de la Xunta, que envió a un guarda forestal a analizar los desperfectos, que le aconsejó "no hacer nada" porque sería un "trabajo inútil", en palabras de la denunciante, ya que los animales volverían a romper la malla de red que cerca sus terrenos.

Para Angélica Díaz, esta situación está provocada por la construcción de la vía ártabra; "asolaron" el hábitat de estos animales ya que, fue a raíz del inicio de las obras de este vial cuando comenzaron los ataques de los jabalíes.

"Nunca hasta ahora llegaron los animales hasta esta zona pero abrieron la vía ártabra sin valorar los daños colaterales", lamenta la afectada, que reclama al Ejecutivo gallego que le abone cerca de 3.000 euros por los daños que los jabalíes ocasionaron en su propiedad. "Ahora ya será el doble de dinero porque los ataques no cesan, son continuos", apostilla.

Desde el Gobierno gallego explican que el problema de los jabalíes ya se detectó en varias zonas aunque rechazan relacionarlo con la construcción de la vía ártabra.

Para controlar la población de estos animales, se realizan batidas periódicas pero, en el caso de la vecina de Oleiros Angélica Díaz, esta solución no es posible, según sostiene la Xunta, debido a que se trata de una zona habitada, por lo que efectuar una batida sería un riesgo para los residentes en el lugar.

Preguntada al respecto de la denuncia de esta vecina de Dorneda, la Xunta aclara que tiene conocimiento de esta situación y que busca "una solución" aunque no se considera responsable de los daños en el patrimonio de Angélica Díaz por lo que, dice, no abonará la cuantía económica, en torno a los 3.000 euros, que reclama la afectada.


FUENTE: LA OPINION DE CORUÑA