La Organización Gallega de Comunidades de Montes (ORGACCMM) y la Unión de
Tecores de Galicia (UNITEGA), ante las lamentables declaraciones hechas en los
medios de comunicación social por algunos ciclistas, en las que acusaban, sin
prueba alguna, directamente a los vecinos comuneros y a los cazadores, de
colocación de cables y tablas con puntas, quiere manifestar públicamente:
1) La condena de la colocación de obstáculos, cables y tablas con puntas en
los caminos y pistas de los montes ya que suponen un verdadero acto criminal
contra los usuarios, tanto que sean titulares de los mismos o no. En este
sentido, reclamamos, tanto de la Policia Autonómica como al Seprona, la
aplicación de dispositivos de vigilancia en las zonas dónde se detectaron estos
óbstaculos, con el fín de detener y poder juzgar a los delincuentes que los
colocan.
2) Los montes vecinales en mano
común, no son ni de titularidades públicas, ni de titularidades privadas; son
de titularidad vecinal, comunitarios. Su titularidad le corresponde única y
exclusivamente a l@s vecin@s comuner@s de un lugar, aldea o parroquia. Dentro
de las normativas vigentes, los únicos que tienen potestad para decidir sobre estas
tierras, son l@s vecin@s comuner@s.
3) Además de ser una titularidad comunitaria, los montes vecinales son
espacios abiertos que cumplen las funcions productivas, medioambientales y
sociales. Muchas personas que no ostentan la condición de la vecino/a
comunero-ra, son usuarios de la función social del monte (senderismo, paseos
con perros, mountain bike). Pero no pueden hacerlo como si todo el rural fuera
un imenso espacio público. Estos usos tienen que estar regulados y autorizados
por los titulares de las tierras; como ya sucede con los aprovechamientos
ganaderos, cinegéticos, la custodia del territorio o incluso con algún club
deportivo.
4) Exigir, por ajenos, usar las tierras del monte vecinal y del rural, sin autorización
de sus titulares, es un acto de invasión, de ocupación ilegal. Actos que
solamente pueden traer consecuencias negativas. Tanto para los titulares de las
tierras (derivadas de la responsabilidad civil subsdiaria), como para los
usuarios (desconocimiento de la situación de los terrenos ), incluso para el
ecosistema. Sirva como ejemplo el hecho de que, mientras en los meses de mayo,
junio y julio, por normativa, se prohíbe a los cazadores entrenar sus perros en
el campo, nada impide que personas con perros de compañía paseen con los perros sueltos, causando
molestias y daños considerables a la fauna que en esos meses se encuentra en
pleno periodo reproductor.
Por todo esto, tanto la ORGACCMM como UNITEGA, reclaman de la Xunta de
Galicia que inicie lo antes posible una campaña formativa-informativa en los
medios de comunicación públicos (tvg , radio galega......), que sirva para
formar a estos potenciales usuarios del medio rural, de forma que tomen
conciencia de que es necesario respetar a los titulares de los terrenos en los
que desarrollan sus actividades de ocio, pues son los verdaderos responsables
finales de la conservación de los mismos.
COMUNICADO DE LA ORGACCMM Y UNITEGA