Las mancomunidades de montes de O Castrove-Salnés, Pontevedra y O Morrazo inician una campaña de difusión para concienciar a la población de que «el monte vecinal no es público».
Claudio Quintillán y Carlos Morgade, portavoces de estas comunidades, comparecieron en rueda de prensa en Pontevedra para lamentar que "en los últimos tiempos" el monte vecinal en mano común y las comunidades de montes están "siendo blanco de todo tipo de actuaciones y comentarios por parte de ciudadanos que hacen uso de ese territorio con diferentes fines". Entre otros el senderismo, ciclismo de montaña, quads, ganado o caza, y que les acusan de la colocación de cables cortando sendas, obstáculos en medio de pistas, carteles con prohibiciones y "también por accidentes que se producen, achacando a las comunidades la responsabilidad", indican. Los comuneros impulsan una declaración por un uso seguro y sostenible del monte vecinal en la que se recoge el "rechazo inequívoco" de cualquier medida que se hubiera tomado para hacer daño a los usuarios del monte, como es el caso de algunos cables para evitar el paso de ciclistas y motoristas.
Además, aseguran que la mayoría de los ciudadanos considera este tipo de espacios verdes como suelo público cuando se trata de disfrutarlo y propiedad privada a la hora de reclamar su mantenimiento, y recuerdan que ir al monte a recoger setas, por ejemplo, requiere la autorización de los propietarios del monte.
Claudio Quintillán y Carlos Morgade, portavoces de estas comunidades, comparecieron en rueda de prensa en Pontevedra para lamentar que "en los últimos tiempos" el monte vecinal en mano común y las comunidades de montes están "siendo blanco de todo tipo de actuaciones y comentarios por parte de ciudadanos que hacen uso de ese territorio con diferentes fines". Entre otros el senderismo, ciclismo de montaña, quads, ganado o caza, y que les acusan de la colocación de cables cortando sendas, obstáculos en medio de pistas, carteles con prohibiciones y "también por accidentes que se producen, achacando a las comunidades la responsabilidad", indican. Los comuneros impulsan una declaración por un uso seguro y sostenible del monte vecinal en la que se recoge el "rechazo inequívoco" de cualquier medida que se hubiera tomado para hacer daño a los usuarios del monte, como es el caso de algunos cables para evitar el paso de ciclistas y motoristas.
Además, aseguran que la mayoría de los ciudadanos considera este tipo de espacios verdes como suelo público cuando se trata de disfrutarlo y propiedad privada a la hora de reclamar su mantenimiento, y recuerdan que ir al monte a recoger setas, por ejemplo, requiere la autorización de los propietarios del monte.
FUENTE: EL FARO DE VIGO
