Fin de semana marcado en rojo en los calendario de los cazadores. Será mañana cuando comience la nueva temporada y lo hace con positivas estimaciones en la comarca. La recuperación de los tecores y la ausencia de brotes de enfermedad significativos llevan a pensar en que serán buenas jornadas para la actividad. El conejo volverá a ser la pieza más abundante. Por ahora la perdiz, pese a los intentos de repoblación, sigue siendo escasa.
"De perdices hay una escasez que afecta, en realidad, a toda la provincia; de hecho ya ni se cazan cuando se encuentra alguna para favorecer su recuperación, pero lo tienen difícil porque tienen que imponerse a la presencia de varias especies depredadoras en la zona", explica el presidente de la Federación de Pontevedra de Caza, Juan Ángel Alonso. Así, recalca que lo más abundante será el conejo, si bien en otros puntos de la provincia como el Deza o el Baixo Miño resulta habitual el apresamiento de liebres.
Desde la entidad se destaca que las áreas de caza más próximas a la ciudad del Lérez inician esta temporada con unas perspectivas favorables por esa ausencia de problemas y enfermedades que se han constatado en otros lugares. Así, ejemplifica que "en la zona de O Salnés hubo una hemorragia vírica y eso merma considerablemente la cantidad de ejemplares". De todos modos, recalca la "labor de las sociedades de caza" en la recuperación de estas zonas.
Por otro lado, una de las peculiaridades que tiene esta temporada es que contará con dos jornadas más de los habitual. La campaña concluye el seis de enero, pero su inicio se ha adelantado para que no coincidiese con la jornada electoral del 21-O. Hasta ahora siempre se ha puesta en marcha el período de caza en el tercer fin de semana del mes de octubre.
Solo en la provincia de Pontevedra hay más de 12.000 seguidores de esta práctica. Una cantidad que, lejos de disminuir, en los últimos años ha experimentado un ligero ascenso que garantiza su continuidad. "En los exámenes de cazador, que se celebran cuatro convocatorias al año, cada vez nos encontramos con más jóvenes que quieren comenzar a cazar", puntualiza Alonso.
Además, asegura que la afición está evolucionando hacia nuevos adeptos. "El perfil del cazador es el de un paisano de aldea, muy en contacto con el monte, aunque también se une cada vez más gente de la ciudad. Ésta es una afición muy social en la que nos juntamos desde un albañil a un médico", describe el responsable de la agrupación provincial.
FUENTE: EL FARO DE VIGO
