11/8/12

El jabalí causa grandes destrozos en silos y fincas de Lamas, Pardemarín y Cereixo


El jabalí está ocasionando grandes destrozos en silos y fincas de parroquias estradenses como Lamas, Pardemarín, Rubín, San Xurxo de Cereixo o Santa Cristina de Vinseiro. Uno de los ganaderos más afectados, Jesús Conde, relató ayer que el jabalí se viene cebando €textualmente€ con sus silos de maíz desde hace aproximadamente un mes.

Según indicó este propietario de 97 cabezas de ganado vacuno, el jabalí le ha ocasionado cuantiosos daños en dos de los silos de maíz que tiene en su explotación €sita en el lugar de Fontecova, en la parroquia de Lamas€ bajo la pretensión de reducir el gasto de producción. Con este objetivo, habilitó silos que acumulan el alimento de dos meses de sus reses.


Según relató, el primer ataque a uno de estos silos lo notó el pasado 15 de julio. Desde entonces, los ataques se han multiplicado y han afectado también a otro silo, al que el jabalí le rajó 15 metros de plástico del silo por un costado, rompiéndolo una y otra vez e incluso llegando a destrozar una capa de triple plástico habilitada por el propio ganadero tras los primeros ataques. En su afán por evitar que volvieran a producirse, Conde rodeó incluso los silos con pastores eléctricos pero, lejos de amilanarse, el jabalí llegó a saltar por encima y dañarle el silo por su parte superior.

El ganadero ya comunicó la situación al presidente del tecor de A Rocha y espera que tome medidas para ponerle punto y final. Asimismo, será uno de los ganaderos que el lunes acuda a la Alcaldía €junto con el secretario de Coastra, Alfonso Otero, y otros ganaderos afectados€ para tratar de recabar el apoyo del alcalde José López Campos y urgir a que la administración propicie una solución. Acusan un brutal incremento de jabalíees en la zona en el último trimestre.

Daños por lobo y jabalí de 2 años aun sin cobrar 
Por su parte, el secretario de Coastra, Alfonso Otero, aseguró ayer que la situación es insostenible. Al actual contexto de crisis, suma la incidencia de los ataques de lobo y jabalí a ganado y cosechas, subrayando que los daños ocasionados son a menudo asumidos por los ganaderossin que la administración les pague las cantidades que les corresponden legítimamente a modo de indemnización. A modo de ejemplo, indicó que él mismo sufrió en los 2 últimos años cuantiosos daños en sus cosechas de maíz y la pérdida de 3 terneras que aun no ha cobrado.