La difusión de una fotografía en Facebook ayudó a rescatar un águila culebrera herida que fue localizada el pasado sábado en el municipio de Folgoso do Courel, pero el socorro llegó al parecer demasiado tarde para el ave, que murió ayer en el Centro de Recuperación de Fauna de O Veral, en Lugo.
El ave fue localizada hacia las nueve y media de la noche por Orlando Gregorio Álvarez, miembro del grupo ecologista SOS Courel, cuando paseaba por la carretera comarcal LU-615. Según explica, el águila estaba posada sobre un muro, con las plumas muy mojadas. Al pasar por debajo de ella un perro que acompañaba a Álvarez, el águila saltó del muro con la aparente intención de atacarlo. Con el impulso fue a caer en medio de unas zarzas en las margen izquierda de la carretera. Al principio -cuenta el testigo- se quedó caída con la cabeza para abajo, con las alas desplegadas y descolocadas. Después se enderezó, pero ya no intentó remontar el vuelo.
Aunque el animal se encontraba al parecer en mal estado, Álvarez no intentó recogerlo del suelo «polo evidente perigo de semellante peteiro aberto». Llamó entonces al teléfono de emergencias 112, pero tuvo que esperar cerca de hora y media hasta que le dieron una respuesta desde este servicio. Mientras tanto fue a buscar una linterna a su casa para poder ver de noche. La respuesta, según cuenta, no le sirvió de mucho. «Dixéronme que ata o luns non se podería recoller e que lle fixera o que quixese ao paxaro», dice.
Con guantes y chaqueta
Con la ayuda de otros vecinos de la zona, el ecologista recogió después el ave protegiéndose con unos guantes y una chaqueta y pudo meterla en una caja. Unos profesores del colegio público de Seoane identificaron el animal como un águila culebrera y les recomendaron taparlo para que se tranquilizara y resguardarlo del frío.
Ante la falta de una respuesta por parte del 112, Álvarez intentó buscar consejo «nunha clínica veterinaria privada moi coñecida da capital lucense», pero le respondieron que a esas horas no estaba disponible ningún especialista para atender un caso de este tipo. «Dixéronos que mentres lle désemos uns graos, que xa non tentamos, porque as aguias ao parecer son todas carnívoras», añade.
Sin saber a dónde acudir, Álvarez colgó entonces una foto del águila en Facebook y le añadió un comentario acerca de la situación. Un particular que vio el mensaje tuvo la idea de avisar a los guardias de Conservación da Natureza. «A min non se me pasara pola cabeza con todo o traballo de recoller a aguia e de facer as chamadas», reconoce el ecologista.
Una agente de este servicio recogió el animal el domingo por la mañana y lo llevó al centro de O Veral. Los responsables del centro aún no han determinado la causa de la muerte del ave, pero señalan que estaba muy desnutrida.
Por su parte, Álvarez cree que si el rescate se hubiese llevado a cabo con más rapidez quizá se habría llegado a tiempo de salvar la vida del águila y se queja de que la Dirección Xeral de Conservación da Natureza no haya habilitado con la Axencia Galega de Emerxencias un protocolo para actuar en casos como este. «Non é de recibo que se teña un animal protexido doente sen atender durante dous días», señala.
FUENTE: LA VOZ DE GALICIA
