La Sociedade de Caza de Vila de Cruces, promotora, prevé que asistan a la cita más de 600 perros, llegados desde distintos puntos de Galicia, de León o Portugal. Su presidente, Manuel Camino, anuncia las novedades de este año y reflexiona sobre la delicada salud de los monte de la zona.
–A falta de menos de doce días para que se celebre la feira. ¿cómo va la inscripción?
–Ahora mismo hay una reserva bastante superior a la de otros años a estas alturas. Tenemos sobre setenta jaulas confirmadas (cada una lleva seis perros). Se puede reservar hasta la víspera de la feira, pero los que lo hagan a partir del lunes 30 no tendrán derecho a la ración de pulpo gratuita. La última semana es cuando más inscripciones se hacen. Calculamos que habrá entre 600 y 700 canes. Esperamos que venga un perro lobo español, que llama mucho la atención, y un can especializado en la caza de oso.
–El cruceño es un certamen referente a nivel gallego. ¿Esperan muchos ejemplares foráneos?
–Tenemos perros de Valga, Lugo, Ferrol, Moraña y Outeiro de Rei, pero también de Portugal y León. Hay personas que traen hasta cuarenta animales. Es la única feria de estas características de la provincia y año tras año vamos creciendo, pese a que se nota la crisis. En el certamen de Camponaraya, en Ponferrada, uno de los mejores, también se viene notando menos perros estos últimos años.
–¿Qué destacaría de esta edición?
–Esta vez atrasamos casi un mes la celebración de la feria y eso hace que se estén inscribiendo muchos más cachorros que otros años. Antes no lo hacían porque el certamen coincidía muy próximo al fin de la temporada de caza y los animales no estaban preparados. A nivel de actividades, vamos a hacer una exhibición de perdices de la granja de Mouriscade para que los chavales las vean, porque hoy en día es casi imposible encontrarlas en los montes. También mostraremos conejos de nuestra Sociedad y habrá una exhibición de cetrería. Contaremos con una quincena de aves: Búhos reales, águila de Harrison, un cuervo real, etc. También por la tarde se hará una demostración de tiro con arco para que se acerque a probar quien quiera.
–Y el programa se amplía al sábado 5 con una tirada de recorridos de caza con tiro al plato...
–Los entrenamientos serán en en O Barral (Sabrexo) a partir de las 11 y a las tres de la tarde habrá tirada oficial. Está pensada para los aficionados. Con llegar allí y pedir vez será suficiente.
–No hay caza sin monte ¿Cómo ve la salud de los de la zona?
–El pino y el eucalipto están acabando con los montes de Galicia en general. Cada vez cazamos menos conejos porque se están quedando sin hábitat natural. Es una especie que si tiene un buen ambiente de repoblación hay muchos, si no, no vale nada.
–¿Qué papel juega el cazador en su mantenimiento?
–Ahora mismo es bastante importante, sobre todo en la caza mayor. Somos un eslabón más en esa cadena. En Cruces cazamos todos los años unos sesenta jabalíes y desde que acabó la caza contamos ya siete accidentes de tráfico provocados por ellos. Creo que hacemos una conservación vital en su control, y también del corzo, que está empezando a criar en exceso. La gente empieza a quejarse de que hace daño en las plantaciones.
–¿Pero hay relevo o los jóvenes rehuyen de las escopetas?
–Muy poco. Empiezan solo dos o tres nuevos por año y los que estamos nos vamos haciendo mayores. Hace veinte años éramos más de 300 socios. Hoy quedamos solo 145.
–¿A qué cree que es debido?
–A que en los montes hay cada vez menos caza menor, y a la presión que ejercen sobre nosotros. A la Sociedad se nos multiplicó por siete el seguro de responsabilidad civil en solo cinco años. Pasamos de 800 euros a 5.700. Hay muchos accidentes y las compañías nos los cargan a nosotros.
FUENTE: EL FARO DE VIGO
–A falta de menos de doce días para que se celebre la feira. ¿cómo va la inscripción?
–Ahora mismo hay una reserva bastante superior a la de otros años a estas alturas. Tenemos sobre setenta jaulas confirmadas (cada una lleva seis perros). Se puede reservar hasta la víspera de la feira, pero los que lo hagan a partir del lunes 30 no tendrán derecho a la ración de pulpo gratuita. La última semana es cuando más inscripciones se hacen. Calculamos que habrá entre 600 y 700 canes. Esperamos que venga un perro lobo español, que llama mucho la atención, y un can especializado en la caza de oso.
–El cruceño es un certamen referente a nivel gallego. ¿Esperan muchos ejemplares foráneos?
–Tenemos perros de Valga, Lugo, Ferrol, Moraña y Outeiro de Rei, pero también de Portugal y León. Hay personas que traen hasta cuarenta animales. Es la única feria de estas características de la provincia y año tras año vamos creciendo, pese a que se nota la crisis. En el certamen de Camponaraya, en Ponferrada, uno de los mejores, también se viene notando menos perros estos últimos años.
–¿Qué destacaría de esta edición?
–Esta vez atrasamos casi un mes la celebración de la feria y eso hace que se estén inscribiendo muchos más cachorros que otros años. Antes no lo hacían porque el certamen coincidía muy próximo al fin de la temporada de caza y los animales no estaban preparados. A nivel de actividades, vamos a hacer una exhibición de perdices de la granja de Mouriscade para que los chavales las vean, porque hoy en día es casi imposible encontrarlas en los montes. También mostraremos conejos de nuestra Sociedad y habrá una exhibición de cetrería. Contaremos con una quincena de aves: Búhos reales, águila de Harrison, un cuervo real, etc. También por la tarde se hará una demostración de tiro con arco para que se acerque a probar quien quiera.
–Y el programa se amplía al sábado 5 con una tirada de recorridos de caza con tiro al plato...
–Los entrenamientos serán en en O Barral (Sabrexo) a partir de las 11 y a las tres de la tarde habrá tirada oficial. Está pensada para los aficionados. Con llegar allí y pedir vez será suficiente.
–No hay caza sin monte ¿Cómo ve la salud de los de la zona?
–El pino y el eucalipto están acabando con los montes de Galicia en general. Cada vez cazamos menos conejos porque se están quedando sin hábitat natural. Es una especie que si tiene un buen ambiente de repoblación hay muchos, si no, no vale nada.
–¿Qué papel juega el cazador en su mantenimiento?
–Ahora mismo es bastante importante, sobre todo en la caza mayor. Somos un eslabón más en esa cadena. En Cruces cazamos todos los años unos sesenta jabalíes y desde que acabó la caza contamos ya siete accidentes de tráfico provocados por ellos. Creo que hacemos una conservación vital en su control, y también del corzo, que está empezando a criar en exceso. La gente empieza a quejarse de que hace daño en las plantaciones.
–¿Pero hay relevo o los jóvenes rehuyen de las escopetas?
–Muy poco. Empiezan solo dos o tres nuevos por año y los que estamos nos vamos haciendo mayores. Hace veinte años éramos más de 300 socios. Hoy quedamos solo 145.
–¿A qué cree que es debido?
–A que en los montes hay cada vez menos caza menor, y a la presión que ejercen sobre nosotros. A la Sociedad se nos multiplicó por siete el seguro de responsabilidad civil en solo cinco años. Pasamos de 800 euros a 5.700. Hay muchos accidentes y las compañías nos los cargan a nosotros.
FUENTE: EL FARO DE VIGO
