El pleno del Parlamento acaba de aceptar a trámite, solo con los votos del PP y el rechazo del PSdeG y el Bloque, el primer proyecto de ley de montes de la comunidad gallega, que sienta los pilares para ordenar la superficie forestal, que abarca dos tercios del territorio de Galicia. El texto modifica sustancialmente la ley 3/2007 de prevención de incendios forestales, impulsada por el anterior Gobierno bipartito tras la oleada incendiarias del verano del 2006, hasta el punto de relajar algunas medidas concebidas en su día para evitar que los fuegos amenazaran los núcleos de población.
«É unha lei para queimar Galicia»
«É unha lei para queimar Galicia», dijo alarmada la portavoz de agricultura del grupo del PSdeG, Sonia Verdes, al remarcar que «achega o lume ás casas». De este modo aludía a la corrección de los perímetros de protección de viviendas, las franjas en las que no podrán haber masa forestal, que pasan de los 100 a los 50 metros.
La nacionalista Tareixa Paz se quejó de que la nueva norma «favorece» monocultivos y especies de crecimientos rápido, como las mimosas, y subrayó que «fulmina a política de prevención de incendios forestais».
Diferente lectura hizo la conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, quien puso en valor que el objetivo del nuevo proyecto es «asegurar o aproveitamento do monte en base á sostenibilidade» social, económica y ambiental. De igual modo, el Gobierno refuerza la vocación del texto para frenar el minifundismo, pues uno de sus puntos recoge que no se podrán segregar parcelas forestales por debajo de las 15 hectáreas.
FUENTE: LA VOZ DE GALICIA
