El último caso de ataque lo cuentan los vecinos de la parroquia silledense de Parada, donde los jabalíes han arrasado en los últimos días una decena de prados. "Esta es una zona muy castigada", apunta uno de los afectados, "no hay quien lo sostenga". Por ello, la asociación de vecinos pedirá a la Xunta que autorice "más batidas, porque ya hubo, pero no hicieron nada, no fueron suficientes", añade el mismo ganadero afectado, que se topó con los desperfectos en varias de sus fincas ayer por la tarde. "Vinieron esta noche (por el lunes), pero también estos días de atrás", apunta, alarmado de que los cerdos salvajes actúen sin ningún tipo de temor por la cercanía de las viviendas.
Algunos de los prados arrasados en Parada están próximos al monte, en la zona de Coelleira, pero otros, muy cerca de las viviendas y de las explotaciones agropecuarias. Los vecinos intentan prevenir sus ataques con la colocación de pastores y redes, pero los sistemas no son suficientes para lograr frenar la entrada de los jabalíes hambrientos.
La valoración de los daños en la zona es difícil de calcular, según reconocen los perjudicados, ya que prados enteros preparados para el pasto y para la recolección de hierba quedaron inservibles ante el efecto devastador de los cerdos.
Para los ganaderos la solución pasa por reducir la colonia de jabalíes que subsiste en los montes de la comarca, por ello piden que la Xunta autorice la realización de más batidas. La campaña de caza finalizó el pasado día 6 por lo que ahora es obligatorio el permiso especial y expreso de Administración autonómica para la intervención de los cazadores.
FUENTE: EL FARO DE VIGO